A partir del 1 de enero de 2025, entraron en vigor cambios importantes en las normas que regulan el traslado de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) entre países. Estas modificaciones buscan mejorar el control y la gestión de estos residuos para reducir su impacto ambiental.
¿Qué cambia?
- Más control sobre los traslados: Se endurecen las reglas para exportar e importar residuos electrónicos, especialmente aquellos que pueden ser peligrosos para el medio ambiente y la salud.
- Restricciones a ciertos países: A partir de 2025, no se podrán enviar residuos electrónicos a países que no sean parte de la OCDE, incluso si no son peligrosos.
- Más papeleo y permisos: Para trasladar RAEE entre países de la Unión Europea o con miembros de la OCDE, será necesario un permiso previo (lo que antes no era obligatorio para ciertos residuos).
- Mayor tiempo y costos: Estos cambios pueden hacer que los procesos sean más largos y costosos para las empresas de reciclaje y gestión de residuos.
¿Cómo afecta esto al reciclaje de electrónicos?
Las nuevas normas buscan evitar que los residuos electrónicos terminen en países con poca capacidad para gestionarlos correctamente. Sin embargo, también podrían generar más burocracia para las empresas que trabajan en el reciclaje y el manejo responsable de estos materiales.
¿Qué puedes hacer tú?
Si eres una empresa del sector, es fundamental que te informes sobre estos cambios y te prepares para cumplir con las nuevas regulaciones. Si eres un ciudadano, recuerda que reciclar tus dispositivos electrónicos en puntos limpios autorizados es clave para reducir el impacto ambiental.
