Uno de los factores que más influyen a la hora de determinar la electricidad que se consume dentro de una vivienda es el uso de los electrodomésticos. Y es que según datos del Instituto para la Diversificación y ahorro de la Energía (IDAE), de media anual un hogar en España consume alrededor de 3.487 kW. El empleo de estos aparatos eléctricos y electrónicos (AEE) supone una gran parte de este gasto.
Gracias a las múltiples ventajas y facilidades que nos ofrecen en nuestro día a día, prescindir de algunos de estos dispositivos es una tarea complicada. Lo que sí podemos hacer es aprender a cómo utilizarlos en búsqueda de la mayor eficiencia posible.
En este artículo te detallamos cuáles son los electrodomésticos que más energía consumen, la cantidad de electricidad que utilizan, y algunas recomendaciones para ahorrar y optimizar su uso.
Frigorífico y congelador
El frigorífico es, junto con el congelador, un electrodoméstico esencial para cualquier hogar. Ambos nos permiten mantener fríos y conservar alimentos y bebidas durante mucho tiempo. Sin embargo, su funcionamiento continuo las 24 horas del día hace que se sitúe a la cabeza en cuanto a consumo energético. El primero con 662 kWh y el segundo con 563 kWh.
Optimizar su uso es posible aplicando unos pequeños consejos. Por un lado, hay que permitir que circule el aire por la parte trasera, la cual se debe limpiar al menos una vez al año. También se recomienda regular el termostato entre los 4º y 6º C, no introducir dentro alimentos calientes, dejar la puerta abierta durante mucho tiempo y apagarlo durante temporadas largas en las que no estemos en casa, como las vacaciones.
Lavadora
Las lavadoras también se posicionan en lo alto de este ranking con un consumo de 255 kWh, un 8.6% del gasto total. Eso es porque, a pesar del consumo que realizan, no permanecen tanto tiempo conectadas a la red eléctrica, tan solo un par de horas. La mayor parte de la energía que consumen se destina a calentar el agua para lavar la ropa sucia.
Programando un lavado en frío de la mayor cantidad posible, sobre los 30º C, supondrá un importante ahorro de energía. También las hay que incluyen programas de lavado eco que nos permiten tener el mismo resultado de lavado pero con un consumo mucho más reducido tanto de energía como de agua.
Lavavajillas
Al contrario de lo que se suele pensar, los lavavajillas son uno de los electrodomésticos más económicos, ecológicos y eficientes. Su consumo se sitúa en torno los 246 kWh y su porcentaje de gasto es similar al de las lavadoras. Para ahorrar con un uso se recomienda utilizarlo solo cuando se encuentre a máxima capacidad. Además, sus filtros deben limpiarse a menudo. Los restos de comida que se queden en el interior de este aparato pueden acumularse poco a poco y ocasionar problemas en su rendimiento.
Secadora
En nuestro país gozamos de un clima agradable durante la mayor parte del año, incluso durante los meses de invierno. Esto hace que en muchos hogares no se use este electrodoméstico y, en su lugar, se tienda la ropa al aire libre para secarse. Sin embargo, aquellas personas que cuenten con una secadora deben saber que consumen 255 kWh, un 8.6% del total anual.
Una buena forma de utilizarla con eficiencia es programar, de forma previa, el centrifugado en la lavadora. De esta manera, se reducirá hasta un 50% de la humedad de las prendas y la secadora no necesitará tanta energía para cumplir su función.
Horno
Los hornos que tenemos en nuestras cocinas son capaces de generar altas temperaturas en muy poco tiempo. Esto hace que su consumo se calcule en unos 231 kWh. Una alternativa a su uso es el microondas, pero también puedes ahorrar energía si no lo precalientas para cocciones de más de una hora. Trata de no abrir mucho las puertas para evitar pérdidas de temperatura, y aprovecha el calor residual que permanece en su interior cuando lo apagues para terminar de cocinar.
Televisión
Los televisores modernos, comparando con los más antiguos que funcionaban con tubos de rayos catódicos, ocasionan un consumo menor de energía. En torno a los 263 kWh. Aquellos que cuentan con pantallas LCD con retroiluminación LED son las que más energía ahorran.
Una pregunta. ¿Desenchufas la televisión cuando no la estás viendo? La mayoría de las personas no lo hacen. El ‘stand by’ o consumo silencioso es responsable de 7,8% del gasto medio anual por hogar. Algo que puede aplicarse tanto a la tele como a otros muchos electrodomésticos.
Ordenadores
Aunque los portátiles y PC con pantalla plana consumen menos que los ordenadores de sobremesa, pero el consumo medio de estos aparatos electrónicos se sitúa en 172 kWh. Bajar la iluminación de los monitores, desconectar dispositivos como impresoras y, sobre todo, apagarlos cuando no estén en uso, es fundamental para lograr ahorrar energía.
Existen también otros elementos que marcan el consumo energético de un hogar, como los sistemas de iluminación y calefacción, o pequeños electrodomésticos como la aspiradora y la plancha. Así como el aire acondicionado, que tan solo se usa en épocas concretas. De cualquier forma, la clave para ahorrar energía en casa es procurar darles a todos estos dispositivos un uso y mantenimiento correcto. De esta forma no solo conseguirás que trabajan más eficientemente, también evitarás que se estropeen y acaben convertidos en RAEE antes de tiempo.
