Las generaciones mas jóvenes son el futuro del medioambiente, del planeta, por ello es muy importante inculcarles desde pequeños el concepto del reciclaje, su importancia, su trascendencia y tratar de inculcarles un estilo de vida sostenible. Como por ejemplo, separar la basura y tirarla en su contenedor o identificar qué aparatos que usan en su día a día son un RAEE y deben ser reciclados cuando quedan inservibles.
La mejor manera de conseguir todo lo anterior es enseñar los nuevos conceptos a través de juegos didácticos y dinámicos, para que asemejen la sostenibilidad con algo positivo y divertido.
A continuación os mostramos varios juegos y actividades que podéis llevar a cabo en casa, junto a los mas pequeños, con productos y materiales que tengáis a mano.
1. La carrera del reciclaje
Este juego tiene como objetivo enseñarles a los niños los diferentes tipos de residuos que existen, de plástico, de papel, orgánicos, y enseñarles en qué contenedor va cada uno, en función de su composición. El juego consiste en colocar correctamente y antes que el resto de los participantes, tus residuos en los 3 cubos de reciclaje. Sin embargo, no ganará el más rápido sino el que más residuos haya depositado correctamente en sus cubos.
2. Buenos y malos hábitos
Este juego consiste en enseñar a los niños la importancia de nuestras actividades diarias y cotidianas. La dinámica consiste en darle a los niños un papel con imágenes diferentes, en diferentes situaciones o realizando acciones tanto correctas como incorrectas en relación con el reciclaje y el medioambiente. Un ejemplo sería la imagen de alguien tirando un RAEE a la basura, otra de alguien tirando una pila al mar, y otra recogiendo un plástico del campo. Los niños tendrán que tachar lo que sea incorrecto.
3. Crear juguetes con residuos
La economía circular es un concepto muy importante para el aprovechamiento de los recursos a través de la reutilización. Con esta actividad los niños son capaces de ver cómo un objeto no tiene por qué tener una única función, sino que puede transformarse en lo que ellos quieran y darles una nueva vida útil. Con esta dinámica, no solo aprenden conceptos teóricos sino que también desarrollan su imaginación y creatividad. Un ejemplo puede ser, crear marionetas con calcetines viejos, un catalejo con rollos de papel higiénico, e incluso casas para muñecos con cajas de zapatos.
4. Cuentos sobre reciclaje
La lectura es siempre un gran aliado para la educación. Incentivar el reciclaje a través de la lectura es, además de muy educativo, muy positivo para la asimilación de conceptos. Algunos de los libros infantiles que te recomendamos sobre reciclaje son: “¿Por qué debo reciclar?” De Jen Green y Mike Gordon; “Capitán Verdemán, superhéroe del reciclaje” De Ellie Bethel y Alexandra Colombo; “Los Gulinos” De Luis Amavisca y Noemí Villamuza; y “No es una caja” De Antoinette Portis.
5. Reciclar juguetes que se han convertido en RAEE
Cuando los juguetes como coches teledirigidos, Nintendo´s, o pianos portátiles, dejan de funcionar, es decir, dejan de ser útiles, se convierten en un residuo de aparato eléctrico y electrónico, en un RAEE, y al igual que sucede con cualquier electrodoméstico, hay que reciclarlos. Para identificar qué juguetes acabarán siendo un RAEE debemos saber si han necesitado pilas, batería o conexión a la corriente eléctrica, si es así, cuando dejen de ser útiles se convertirán en un residuo de aparato eléctrico y electrónico.
Ahora durante los meses de verano, todas estas actividades serán muy beneficiosas para que aunque estén de vacaciones sigan aprendiendo pero de forma más práctica, conocerán así conceptos nuevos, a través de juegos que más adelante podrán poner en práctica junto con sus compañeros de colegio.