José Pérez, consejero delegado de Recyclia, ha concedido una entrevista al portal de noticias ambientales del mundo empresarial, El Círculo Verde, con quien ha compartido la importancia que tiene el reciclaje de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) para el avance hacia una Economía Circular.
Para la correcta gestión de estos residuos nació la plataforma Recyclia. Os dejamos la entrevista de su consejero delegado a continuación.
¿Qué es Recyclia?
Recyclia es una entidad sin ánimo de lucro que permite a los fabricantes e importadores de aparatos electrónicos y pilas y baterías cumplir con su obligación de organizar y financiar la recogida y el reciclaje de los productos de este tipo que ponen a la venta, cuando finaliza su vida útil. Cabe señalar que el reciclaje de residuos electrónicos es obligatorio en nuestro país desde 2005 y, el de pilas baterías, desde 2008. A través de Recyclia, los productores comparten esfuerzos y recursos para lograr la recogida y el reciclaje más eficaces, a través de lo que se conoce como Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor.
¿Cuántos aparatos eléctricos y electrónicos se producen en España en la actualidad y cuántos residuos de este tipo se generan?
Al año se ponen a la venta en nuestro país alrededor de 600.000 toneladas de aparatos electrónicos, según datos del registro de productores del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad. Cabe señalar que cualquier productor o importador que comercialice aparatos electrónicos en nuestro país debe estar inscrito en este registro. Por otra parte, los residuos electrónicos crecen a una velocidad tres veces superior al de cualquier otro tipo de residuos y, según la Universidad de las Naciones Unidas, cada español genera la nada despreciable cifra de 17 kilos de desechos electrónicos al año.
¿Qué cantidad de RAEE se reciclan de manera correcta en la actualidad en nuestro país y cuáles son los objetivos que marca la UE para los próximos años?
Solamente los sistemas colectivos que operamos en nuestro país superamos el objetivo obligatorio de recogida del 45% del peso medio de los aparatos puestos en el mercado los tres años anteriores establecido en la Directiva de 2012. Para los próximos años, los objetivos son muy ambiciosos hasta alcanzar, en 2019, el 65% del peso medio de los aparatos introducidos en el mercado o el 85% de los residuos generados.
¿Por qué es importante para el medio ambiente reciclar de manera adecuada los RAEE? ¿Qué ocurre con los RAEE que no se reciclan o se gestionan de forma incorrecta?
Los aparatos electrónicos están fabricados con materiales que, en el caso de no ser tratados adecuadamente, pueden perjudicar el medio ambiente y la salud humana. A ello hay que añadir que todo aparato electrónico que no se recicla supone un desperdicio de materias primas y energía, dado que la gran mayoría de los metales y otros materiales con los que están fabricados pueden recuperarse y reutilizarse. Así, por ejemplo, más del 90% de los materiales con los que está fabricado un teléfono móvil, el 93%, en el caso de un PC, y el 88%, en el de una impresora, son reutilizables en la fabricación de nuevos productos, de forma que evitamos su extracción de la naturaleza. Esto es lo que el sector del reciclaje llamamos la minería del siglo XXI.
¿Cuál es el proceso de reciclaje de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos?
Una vez retirados de los puntos de recogida que integran la red de Recyclia, los residuos son trasladados hasta centros de almacenamiento temporal y enviados desde allí a plantas de tratamiento autorizadas. En ellas se procede a clasificar los residuos según su categoría y a retirar los materiales potencialmente contaminantes (tales como condensadores, PVC, metales pesados, plásticos bromados, mercurio, etc.), que son enviados a gestores especializados para su correcto tratamiento. Finalizado este proceso de descontaminación, se procede a la extracción de los materiales aprovechables, como metales o plásticos, y a su reciclaje a través de un proceso industrial de triturado y molienda que facilita su reutilización.
El Gobierno acaba de publicar la Estrategia de acción de Economía Circular 2018-2020. La fecha de información pública para alegaciones acaba de concluir el 12 de marzo. ¿Alguna crítica constructiva desde Recyclia?
Nuestro balance es positivo, ya que nos sitúa a la vanguardia mundial en la transición hacia este nuevo modelo productivo. Valoramos, especialmente, las medidas sobre vigilancia e inspección del traslado transfronterizo de residuos, una demanda histórica del sector del reciclaje de aparatos electrónicos desde el comienzo de nuestra actividad hace más de 15 años. Además, nos parece imprescindible no desaprovechar la experiencia y el know how que proporcionan las dos décadas de actividad en recogida y reciclaje de flujos de residuos de nuestro país, en especial la eficacia que ha demostrado el modelo de Responsabilidad Ampliada del Productor.
¿Qué potencial de creación de empleo tiene el modelo de Economía Circular?
La Comisión Europea asegura que la consecución de un modelo de economía circular, que implica la eliminación de residuos, el diseño ecológico de los productos, la reutilización y otras medidas similares, aportaría a las empresas de los estados miembros un ahorro neto superior a 600.000 millones de euros anuales (el 8% del PIB) y más de dos millones de nuevos puestos de trabajo. Además, no es menos importante la reducción de las emisiones totales de gases de efecto invernadero entre un 2 y un 4%.
¿Cómo se consigue llegar a la economía circular a través de la gestión correcta de los RAEES?
El reciclaje es un elemento esencial para el aumento de la eficiencia y el avance hacia una Economía Circular. Probablemente, el mayor paradigma del aprovechamiento es la minería urbana o la recuperación de materiales, algunos de ellos críticos por su escasez, mediante el reciclaje de residuos electrónicos. Basta citar el siguiente dato de la Unión Europea: si se recogieran el 95% de los teléfonos móviles en desuso, sería posible ahorrar más de mil millones de euros en los costes del material de fabricación.
¿Cuáles son los materiales que más se aprovechan de los aparatos eléctricos y electrónicos?
Fundamentalmente, plástico, vidrio y metales, tales como hierro, cobre o aluminio, además de metales preciosos, como el oro, la plata o el paladio, en pequeñas proporciones. Según los últimos datos disponibles sobre el uso de materiales reciclados, en 2015, en Europa el 37% del aluminio y el 40% del acero consumido provino de material reciclado.
¿Hasta qué punto es importante la concienciación ciudadana, las campañas de comunicación o medios como El Círculo Verde para hacer llegar el mensaje?
Los grandes aparatos como lavadoras o neveras se recogen para su reciclado en los puntos de venta porque las empresas que te instalan una se llevan la vieja, pero hay otros muchos aparatos eléctricos y electrónicos, además de pilas o teléfonos móviles, que tenemos que depositar los ciudadanos en los lugares adecuados. La concienciación ciudadana es una parte esencial de nuestra actividad ya que es el eje de la sostenibilidad medioambiental. En Recyclia invertimos y dedicamos una buena parte de nuestra actividad a formar y a educar en esta sensibilidad y a difundir los beneficios y la importancia del reciclaje de esta clase de residuos. En esta labor incluimos desde educar en el respeto al medio ambiente a las nuevas generaciones, hasta facilitar a los ciudadanos la entrega de su equipo viejo o algo tan básico como informarles de sus derechos como consumidores.