La vuelta a la rutina después de la Navidad significa comenzar a cumplir aquellos propósitos que nos pusimos el día 1 de enero, la vuelta al trabajo y al colegio, las rebajas, descambiar aquellos regalos que nos han hecho y que no nos han gustado y hacer limpieza en casa de todo aquello que no usamos. Hoy os traemos algunas recomendaciones a tener en cuenta para todo aquello que solemos hacer al comienzo del año y empezarlo de una forma limpia, ordenada y sostenible, ¡atentos al #RAEEConsejo!
Normalmente, con los regalos de Navidad y las compras en las rebajas, solemos adquirir nuevos aparatos eléctricos y electrónicos que sustituyen a los que ya teníamos, bien porque habían dejado de funcionar o porque por alguna pequeña deficiencia decidimos sustituirlo por otro nuevo. En cualquiera de los dos casos, aquellos aparatos de los que decidamos deshacernos deben ser gestionados correctamente. Te dejamos algunos ejemplos y cuál debería ser su correcta gestión a continuación:
- Si aprovechas para comprar una televisión nueva porque la que tienes ha dejado de funcionar después de las uvas, recuerda que puedes entregar la vieja de forma gratuita en el punto de venta. El distribuidor también podrá recogértelo en tu casa si se produce un envío a domicilio del nuevo aparato.
- Si te han regalado un robot de cocina y decides deshacerte de otros electrodomésticos que ya no vas a usar, ¡no los des por perdido! Llévalos a entidades sociales sin ánimo de lucro que puedan darle un segundo uso o a establecimientos dedicados al mercado de segunda mano, con el fin de potenciar la reutilización de los aparatos en aras de la protección del medio ambiente. No obstante, los comercios de segunda mano tienen unas obligaciones que deben cumplir, y sobre lo que te hablamos en otro post.
- Si los Reyes Magos les han traído a tus hijos juguetes nuevos, deberías tener en cuenta varias cosas importantes con respecto a los juguetes antiguos y que se consideran dentro de la categoría de los RAEE. En primer lugar, ¿cómo saber si un juguete es un RAEE? Hay 3 formas de averiguarlo.
- Si para funcionar han necesitado pilas, batería o conexión a la corriente eléctrica.
- Si emitía luz o sonido.
- Si muestra el símbolo de “no tirar al contenedor” en el manual de instrucciones del juguete, en la caja o en el etiquetado de éste.
Al margen de estas indicaciones, primero es importante decidir si al antiguo juguete le ha llegado el final de su vida útil o puede tener una segunda vida. En el primer caso, deben ser gestionados para su posterior reciclaje llevándolos a un punto de recogida. Algunas jugueterías instalan contenedores para recoger residuos electrónicos. Pero si los juguetes antiguos todavía funcionan, no te deshagas de ellos, dónalos a una ONG para que otros niños y niñas puedan disfrutarlos.
- Sabemos que desmontar todos los adornos de Navidad puede ser una lata, pero es un excelente momento para examinar en qué estado se encuentran para deshacernos de aquellos que ya no sirvan para el próximo año. Entre ellos están las luces decorativas que en caso de haberse fundido ahora son un RAEE y debemos gestionar y reciclar correctamente. Puedes llevar tus bombillas fundidas a algunos de los puntos de recogida de Ambilamp. Si quieres informarte un poco más sobre las lámparas y bombillas que sí se reciclan y cuáles no, te hablamos de ellos en otro post.
Como ves, son acciones muy sencillas que además de poner en orden nuestro hogar colaboran con la sostenibilidad y con aquellas personas que más lo necesitan. Esperamos que estos consejos sean útiles para empezar el 2018, aunque son ideales para cumplirlos durante todo el año. En el nuevo año, actúa, recicla y conecta con la naturaleza.