A lo largo de nuestro día a día le damos uso a una gran cantidad de electrodomésticos que, con el tiempo, acabarán por convertirse en un Residuo de Aparato Eléctrico o Electrónico (RAEE). Ya conocemos los PAE (pequeñas aplicaciones electrodomésticas) y los GAE (grandes artículos electrodomésticos), pero también existen otros aparatos que no se clasifican en estos dos grupos y son muy comunes de ver por casa, los aparatos electrónicos de bajo consumo. Hoy vamos a tratar uno en particular que está muy de moda, los altavoces portátiles.
Los altavoces portátiles son unos aparatos que, en muy poco tiempo, se han convertido en tendencia por ofrecer una gran calidad de sonido, a pesar del poco espacio que ocupan, y la comodidad y sencillez con la que se utilizan o controlan. Además, hace un par de años aparecieron en el mercado los altavoces inteligentes, asistentes digitales o de voz que pueden vincularse con otros dispositivos y hacer varias tareas.
Este tipo de aparatos tiene cada vez más presencia en nuestros hogares y, aunque su utilidad sea diferente a la de otros electrodomésticos, pueden convertirse igualmente en residuos.
Es cierto que, cada vez más, nos estamos acostumbrando a ir a un punto verde cuando una lavadora, un frigorífico, u otro gran electrodoméstico se avería sin posibilidad de reparación o ha terminado su vida útil. Sin embargo, cuando se trata de aparatos móviles de pequeño tamaño, como teléfonos móviles, cargadores y altavoces portátiles, no pensamos a menudo en hacerlo. Resulta más fácil tirarlos a la basura como si nada en lugar de preguntarnos como tener que reciclarlos.
Como residuo electrónico que son, los altavoces portátiles deben reciclarse, ya que están fabricados con componentes no biodegradables y algunos, como es el caso de las baterías, son altamente contaminantes. Por esta razón, resulta de vital importancia para el cuidado del medio ambiente aprender la importancia de desecharlos adecuadamente, aunque se tenga que desplazar hasta un punto limpio para poder hacerlo.
Cada año se generan millones de toneladas de residuos electrónicos que deben depositarse en puntos limpios, sin duda, los mejores lugares para ser recogidos y desde donde serán destinados a plantas de reciclado donde se clasificarán y desensamblarán sus piezas. Algunas se volverán a utilizar y otras se fundirán para crear materias primas.
Además, te recordamos que, para identificar estos elementos y separarlos de otros restos de residuos, debe aparecer siempre este símbolo del reciclaje en la caja, el etiquetado o en el manual de instrucciones. ¡Presta atención por si lo ves para saber que tienes que reciclar correctamente!